6 de abril: Día internacional de la asexualidad

La asexualidad, se constituye como un paraguas muy amplio de orientaciones que incluye la demisexualidad, demisexuales, fraisexuales, grisexuales y litosexuales, asexualidad y otras identidades. Debe ser entendida como un tipo de orientación sexual hacia ninguna persona, es decir, la persona asexual no siente atracción sexual por otros, pero sí que puede sentir el resto de atracciones, como por ejemplo la romántica, la intelectual, etc.

Sin embargo, una parte de los asexuales, aunque no se sienten atraídos sexualmente por otras personas, ejercen la autosexualidad ya que presentan excitación física, líbido o impulso sexual pero no hacia una persona.

En el ámbito de la pareja, pueden tener relaciones sentimentales con personas que no son asexuales. Esto va de la mano con la representación del amor que cada persona tenga, y es posible siempre y cuando haya claridad en los acuerdos y compromisos de la relación.

Por tanto, la asexualidad es y debe ser tratada  como otra de las tantas formas de identidad y orientaciones, experiencias de género y vivencias como seres sexuados. A pesar de que  se calcula que solo el 1% de la población es asexual, merece ser visibilizado, escuchado y respetado por todas las personas que conformamos la sociedad.

Aunque el concepto de asexualidad se remonta a los estudios de Alfred Kinsey en 1948, el Día Internacional de la Asexualidad se establecida como una campaña global más recientemente. La celebración se ha consolidado en la década de 2020, con campañas coordinadas a nivel mundial.